testimonio de una infidelidad

Las lagrimas caian
el silencio me ahogaba.
Mi pulso me daba por muerto
y mis dientes destrozaban mi corazon.

Mi cara inundada de abismo,
de odio y de ira.
Mi cabeza repleta de incognitas,
de pecados y remordimientos.

El segundo se torno en minuto;
en hora; días y años.
La vida se disfrazo de verguenza,
delito y oscuridad.

Las lagrimas caian todavia,
los ruidos de lo ajeno ,
de lo infiel destrozaron todo,
mi memoria , mi alma.

Mi existencia era solo un vacio,
mientras veia el sudor de aquella espalda.
Mientras observaba como sentenciaba
su condena , su culpa.

Las lagrimas ya no existian.
Se esfumo el amor,
y finalmente fui más demonio que nunca
y termine el capitulo de la historia.

1 comentario:

Kotho dijo...

Espero nunca encarnar a ese sujeto.